Vamos a utilizar distintas técnicas que nos ayuden a convertir lo que tengamos en la imaginación en un poema bonito, musical, divertido, emocionante,... Cada uno como más le guste, pero procurando que sea un poema con calidad.
TORMENTA
En los cipreses,
los búhos.
En los pinos,
las lechuzas.
En los álamos,
los grajos.
En las escobas,
las brujas.
Ahora pensemos, por ejemplo, en palabras relacionadas con una casa:
tejado, azotea, ventana, puerta,...
tejado, azotea, ventana, puerta,...
Pensemos también en otros animales:
gato, ratón, ardilla, gorrión,...
A continuación vayamos cambiando las palabras del poema de Gloria Fuertes por esas que a nosotros se nos han ocurrido:
En el tejado,
el gato.
En la azotea,
la ardilla.
En la ventana,
el ratón.
En la puerta,
el gorrión.
Seguimos con nuestro proceso creativo. Añadamos ahora un verbo a cada animal:
En el tejado,
dormía el gato.
En la azotea,
saltaba la ardilla.
En la ventana,
asomaba el ratón.
En la puerta,
revoloteaba el gorrión.
Y habremos conseguido ya nuestro nuevo poema.
Podríamos continuar alargándolo con más versos, haciendo nuevas transformaciones, introduciendo otras palabras (adjetivos, preposiciones), etc.
Incluso convirtiendo cada par de versos en pareados:
En el tejado de María,
dormía el gato de Sofía.
En la azotea de Andrés,
saltaba la ardilla de Isabel.
En la ventana de Luisa,
asomaba el ratón de Elisa.
En la puerta de Tomás
revoloteaba el gorrión de Blas.
Así hasta que consigamos un poema que nos guste.
No olvidemos de pedirle que lo lea a nuestra hermana, a nuestro papá, a la abuela y, por supuesto, al profe. Ellos nos ayudarán a que el poema quede estupendo.
Así hasta que consigamos un poema que nos guste.
No olvidemos de pedirle que lo lea a nuestra hermana, a nuestro papá, a la abuela y, por supuesto, al profe. Ellos nos ayudarán a que el poema quede estupendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Proocura hacer tus comentarios con el debido respeto y consideración hacia las personas de toda la comunidad educativa. GRACIAS.